Juan Diego Troconis
C.I. 21.142.473
3 de noviembre de 2014
Control de lectura #1
La entrevista:
la verdad escondida del hombre
Milan Kundera, el famoso escritor checo, afirmó una
vez: “Periodista no es aquel que pregunta, sino aquel que tiene el sagrado
derecho de preguntar”. Juan Cantavella utiliza esta cita en el marco de su
libro “Manual de la entrevista periodística” para expresar el papel que juega
nuestra profesión en uno de los géneros más importantes.
Cada reportero o entrevistador tiene en sus manos la
oportunidad y la responsabilidad de hacer las preguntas correctas para
descubrir el pensamiento o la personalidad de una persona de interés, y de
darle a su audiencia la información que espera. Como afirma Cantavella, la
intención del género es que “El entrevistado exprese lo mejor de sí mismo en el
trascurso de la conversación, incitado por las preguntas y obligado a
reflexionar a partir de estas”.
Un ejemplo de esto es el portal informativo y foro
Prodavinci, donde cada uno de los entrevistadores que realizan su labor para la
página, e incluso aquellas entrevistas que son tomadas de otros medios, buscan
preguntas que hagan que sus interlocutores reflexionen y profundicen sobre uno
o varios temas.
Cada periodista le imprime su estilo propio y su
personalidad a la entrevista, esto debido a que es relativamente nueva como
género y que además es rica en recursos literarios. En Prodavinci hacen vida
muchos periodistas y entrevistadores que tienen formas propias de llevar las
conversaciones y de redactarlas posteriormente, aunque todos mantienen algunos
aspectos y características en común como la realización de preguntas muy
abiertas, el trato directo y cercano con el entrevistado y la redacción muy
alineada con la línea del medio.
Tipo de
entrevista
Cantavella establece una división para este tipo de
conversaciones periodísticas.
Primero, las de declaración, en las que el periodista
busca hacer preguntas sobre un tema o hecho noticioso a un experto o a un
involucrado para agregar información a una noticia, reportaje o artículo. En
este caso el periodista puede hacer citas textuales con comillas o parafrasear
las frases de su interlocutor. Además, agrega Cantavella, las citas deben ser
sustanciosas, es decir, deben expresar una idea completa y explicarla. En este
caso, la entrevista no es un género sino una herramienta.
Poco uso hace Prodavinci de este tipo de subgénero
pues su enfoque es más de opinión (crónicas, artículos, entrevistas de
personalidad). Cuando apelan a la entrevista de declaración suelen utilizar
declaraciones de académicos y expertos y usar citas breves a lo largo del
trabajo periodístico. Una muestra podría ser el reportaje “¿Tienen derechos los
fumadores?” del 30 de octubre de 2014, donde se utilizan algunas declaraciones
de Audrey Silk como base del reportaje.
Posteriormente nos encontramos con las entrevistas de
personalidad que, según Cantavella, representan un género por sí mismas. Estas
son una conversación entre el periodista y una figura que de interés general y
con cierto nivel de influencia ya sea local o mundial. Martín Alonso las
considera “Un trozo de biografía y de novela” de los personajes.
El entrevistador no solo busca respuestas concretas,
también estudia, analiza y escribe sobre las actitudes que toma el
entrevistado, su lenguaje corporal, su tono de voz, la forma como vive y cómo
se desenvolvió la conversación.
En esta entrevista, no solo se busca repetir letra a
letra las respuestas del entrevistado sino permitir al lector conocer la
personalidad y la actitud que el entrevistador logró descifrar de su interlocutor.
Como dice Martínez Albertos, “Las verdaderas entrevistas son las que se centran
en una persona y no en sus declaraciones”.
Puede ser redactada de varias maneras. Puede ser
escrita como un texto donde el periodista narre la experiencia de la conversación,
los temas tratados y agregue algunas citas textuales entre comillas de las
declaraciones del entrevistado. También se puede redactar con una introducción
donde el entrevistador resuma la vida o la experiencia de la otra persona y
agregue detalles de cómo se realizó la entrevista y posteriormente escribir
textualmente las preguntas y las respuestas que hicieron parte de la misma.
Este tipo abunda en Prodavinci y es desarrollado por
varios periodistas dentro del medio. Las entrevistas en la página web suelen
iniciar con un resumen de la vida y obra del entrevistado, y en ocasiones
agregan uno o dos párrafos sobre la importancia de este para el tema que se
tratará en la entrevista. Posteriormente, redactan en orden cada una de las
preguntas y las respuestas que formaron la conversación.
Pero el portal nunca incluye elementos que Cantavella
describe como necesarios en su obra. Por ejemplo, la descripción de la
conversación como tal, el lenguaje no verbal del entrevistado y la opinión
general del periodista sobre las respuestas. Encontramos como ejemplos de esto
las entrevistas de Boris Muñoz a Leopoldo López, Milagros Socorro a “Chucho”
Torrealba y Vasco Szinetar y Albinson Linares a Juanita León.
Estas entrevistas suelen ser tituladas con una frase
del personaje que es entrevistado que sea lo suficientemente contundente para
llamar la atención de la audiencia o que en cierta forma resuma un aspecto
importante de la conversación y en la página aplican esto con una frecuencia
casi absoluta y agregan el nombre de quien realizó la entrevista. Ejemplos: “Juanita
León: ‘En LaSillaVacía criticamos a la derecha y la izquierda’ Entrevista de
Albinson Linares.”
Cantavella establece que en algunos casos la
entrevista sirve como una novelización del personaje, mientras que en otros es
una conversión a la realidad. En Prodavinci son muy pocos los recursos
literarios utilizados más allá de algún símil en las preguntas de los
entrevistadores. Por eso, son más un intento de llevar al personaje al mundo
real, reconocerlo por sus conocimientos, por su obra, por su labor, más que por
su personalidad o épica.
Existen otros dos tipos de entrevista, de fórmulas
establecidas donde se buscan respuestas muy concretas sobre los gustos y la
opinión del interlocutor, y la semblanza, que es una conversación sobre la vida
de alguien para hacer una pequeña biografía de esta persona. Las semblanzas
contienen en buena parte la opinión del entrevistador y destacan los rasgos de
su personalidad y su lenguaje corporal.
Abordaje de la
entrevista
Cantavella plantea que existen 3 etapas de la
entrevista. Lo previo que supone el proceso de preparación, la conversación y
la escritura.
En lo previo se suman muchos elementos que hay que
tener listos a la hora de iniciar la conversación con el personaje que queremos
entrevistar. El primero paso es documentarse sobre el personaje y sobre los
temas que se van a tratar. Posteriormente, el periodista debe realizar un guion
o cuestionario base donde va a anotar las preguntas que se tienen planteadas como
esqueleto de la conversación.
El entrevistador no puede limitarse a preguntar lo que
tiene en el guion, este debe ser solo una guía, durante la entrevista hay que
hacer preguntas con base en las respuestas del entrevistado.
Sobre la aplicación de estos aspectos en el portal
Prodavinci, lo único evidente que se puede afirmar es que los periodistas
repreguntar y se plantean nuevas preguntas durante el desarrollo de la
conversación. Por lo que podríamos pensar que los entrevistadores realizan su
guion pero a veces se salen de este para darle más personalidad y cuerpo a la
entrevista.
Luego viene el proceso de la conversación como tal. Una
vez que el periodista ha hecho contacto con el entrevistado, debe acordar un
lugar de reunión para realizar el diálogo. Pero hay ocasiones en que el
interlocutor se encuentra muy lejos del periodista o tiene no puede por
cualquier razón encontrarse con el entrevistador y plantea que el contacto sea
telefónica o por escrito. En el “Manual de la entrevista periodística”,
Cantavella afirma que debe evitarse por todos los medios realizar una
entrevista de forma no presencial y que estas solo son aceptables cuando es
estricta y completamente necesario.
También establece que en muchos manuales de estilo de
medios de comunicación, se establece la posibilidad o no de realizar y publicar
entrevistas no presenciales. En casi ninguna de las entrevistas de Prodavinci se
establece como fue el vínculo o la vía de comunicación por donde se realizó la conversación.
En algunas, como la realizada a Rolando Peña por Rolando J. Carmona, publicada
el 6 de octubre de 2014, se establece el lugar de encuentro donde se realizó la
entrevista.
En otra, el emblemático caso de la entrevista que
realizó Boris Muñoz a Leopoldo López luego de los sucesos políticos y las
revueltas sociales de febrero de 2014 en el marco de “La Salida”, se establece
que fue enviado un cuestionario con las preguntas para que López las
respondiera por escrito desde Ramo Verde, su lugar de reclusión. En este caso,
algunos podrían afirmar que fue justificado enviar el cuestionario debido a que
el entrevistado se encontraba en prisión.
Pero al leer la entrevista vemos como la persona que
recibe el cuestionario tiene más facilidades para elaborar las respuestas.
Además, el periodista no puede repreguntar, ni contradecir lo que dice el
entrevistado.
Por último, viene la parte en la que el periodista
debe sentarse con sus grabaciones y anotaciones a redactar el cuerpo de la
entrevista. Como se mencionó anteriormente, pueden ser escritas de muchas
maneras dependiendo del estilo del escritor y de la forma como se plantea.
También se estableció cómo redactan los periodistas de
Prodavinci las entrevistas: breve resumen de la obra y el pensamiento del
entrevistado y posteriormente, redacción textual de las preguntas y respuestas
que formaron parte de la entrevista. Ejemplos: “Una entrevista a Rolando Peña
hecha por Rolando J. Carmona”, “Entrevista exclusiva a Leopoldo López; por
Boris Muñoz”, “‘Somos custodios de casi dos siglos de imagen de Venezuela’.
Entrevista a Vasco Szinetar por Milagros Socorro”, “Juanita León: ‘En
LaSillaVacía criticamos a la derecha y la izquierda’. Entrevista de Albinson
Linares”.
En conclusión, la entrevista es un género periodístico
muy versátil, altamente influenciado por elementos y herramientas literarias
que busca descubrir la historia y la opinión de una persona para luego
trasmitírsela a las audiencias. Busca conocer y dar a conocer a los personajes
más allá de aquello que la gente piensa de ellos o de aquello que ellos quieren
que pensemos de ellos.
Y es que el periodista escribe por y para las
personas; son estas el centro de la noticia, sus protagonistas, actores y los
que se ven reflejados o afectados. Es precisamente la entrevista el género que
busca resaltar de forma clara y directa este rasgo tan fundamental en nuestro
quehacer periodístico: el ser humano.